Cádiar, recostada en una de las laderas del Barranco del Poqueira, en la comarca de La Contraviesa, aglutina los núcleos de Narila, Yátor, la Rambla del Banco y Cádiar, junto a diversas cortijadas, bañados en su mayoría por el Río Guadalfeo. Los musulmanes la llamaron “Al-Basit”, que significa “la llanura” en alusión a su topografía, y el hispanista Gerald Brenan, el “ombligo de la Alpujarra” por su situación estratégica que la convierte en un nudo fundamental de comunicaciones de la misma.
Es importante no olvidar en nuestro recorrido por el municipio parar en la Iglesia de Santa Ana, construida en el siglo XVI sobre la base de una mezquita y siguiendo las pautas del estilo Renacentista. En ella fueron bautizados los primeros musulmanes convertidos a la fe cristiana.
Al salir de la Iglesia y en la misma plaza nos espera la famosa Fuente del Vino, dedicada a la degustación de vino con fines lúdicos, y adornada con hojas de parra.
Para acompañar esos vinos, el pueblo también nos ofrece su rico arroz liberal de perdiz y una abundante repostería tradicional morisca.